En un amanecer nublado y lluvioso en Maldonado, el mar yacía en calma, invitando a la reflexión y al recuerdo de batallas pasadas en las olas. Julián Schweizer, el surfista de tablas largas, descansaba tras su victoria en la primera fecha del ALAS Pro Tour, pero su mente no se detenía. Con cada ola que rompía en la costa uruguaya, visualizaba su próximo desafío: defender su título latinoamericano y conquistar nuevos horizontes en el mundo del longboard.
La historia de Julián Schweizer está marcada por la determinación y la pasión desde una edad temprana. A los 11 años, descubrió su amor por el surf en las playas de La Paloma, un momento que sembró la semilla de una carrera extraordinaria. A los 16 años, demostró su tenacidad al buscar un entrenador en Costa Rica y embarcarse en una travesía para convertirse en surfista profesional. Convenció a su familia y se sumergió en las aguas del Pacífico en busca de su sueño, enfrentando desafíos económicos y personales con valentía y determinación.
El camino de Schweizer no ha estado exento de obstáculos. El año 2020 marcó un punto de inflexión en la carrera de Julián Schweizer, cuando se vio inmerso en una encrucijada que lo hizo cuestionar su futuro como surfista profesional. El agotamiento derivado de una vida marcada por la itinerancia de las competiciones y la constante búsqueda de estabilidad lo llevó a tomar la decisión de regresar a Uruguay en busca de un nuevo rumbo. Fue en este momento de reflexión que decidió embarcarse en un nuevo camino, optando por estudiar comunicación y establecerse en su país natal, alejado temporalmente de las olas que tanto amaba.
Sin embargo, el vínculo indisoluble con el mar y la pasión por el surf resultaron ser fuerzas irresistibles que lo llamaban de vuelta a su elemento natural. A pesar de haber explorado otras opciones y haberse sumergido en nuevos horizontes académicos, el deseo de deslizarse sobre las olas y perseguir su sueño como surfista profesional seguía latente en su corazón. Finalmente, Julián optó por escuchar su instinto y regresar al océano, una decisión que demostraría ser acertada y marcaría el inicio de una nueva etapa en su carrera deportiva
Después de un año y medio de introspección, Schweizer regresó con renovada determinación. En 2023, se coronó campeón latinoamericano y recientemente triunfó en la primera fecha del ALAS Pro Tour en Punta Roca, Perú. Su actuación destacada en esta competencia, donde obtuvo un puntaje perfecto en una de sus olas, es un testimonio de su habilidad y dedicación al deporte que ama.
A pesar de sus logros, Julián Schweizer reconoce que aún está lejos de alcanzar su plenitud en el deporte. Sin embargo, mira hacia el futuro con optimismo, especialmente con la posibilidad de que el longboard se convierta en un deporte olímpico. Según sus palabras, todo indica que para los Juegos de Los Ángeles 2028, el longboard será incluido en el programa olímpico, un hito que espera alcanzar para representar a su país en la máxima competición deportiva del mundo.
El ascenso del surf uruguayo en la categoría de longboard es un fenómeno que no pasa desapercibido, y Julián Schweizer lo atribuye a una combinación de factores clave. En primer lugar, Uruguay ha emergido como una potencia regional en esta disciplina, gracias a las condiciones óptimas que ofrece para la práctica del longboard. Con extensas playas y un clima propicio, el país brinda un escenario ideal para que los surfistas desarrollen sus habilidades y técnicas en tablas largas.
Además, la versatilidad de las condiciones del mar en Uruguay permite a los surfistas entrenar en una variedad de situaciones, desde olas pequeñas y suaves hasta marejadas más desafiantes, lo que les proporciona una ventaja competitiva en la escena internacional. Esta diversidad de condiciones ofrece a los surfistas la oportunidad de perfeccionar su arte en diferentes contextos, lo que contribuye al desarrollo de una nueva generación de talentosos atletas que están dejando una marca indeleble en el mundo del surf.
En última instancia, el ascenso del surf uruguayo en el longboard es el resultado de la pasión y el compromiso de los surfistas locales, que han dedicado horas interminables de entrenamiento y sacrificio para alcanzar sus metas. Con el apoyo de una comunidad unida y el reconocimiento internacional de sus habilidades, Uruguay está demostrando ser un competidor formidable en la escena mundial del surf, con una generación emergente de talentos dispuestos a conquistar nuevos horizontes en este apasionante deporte.
Sin embargo, Schweizer también reconoce la necesidad de un mayor apoyo para el surf y otros «deportes menores» en Uruguay. Insta a que se implementen políticas gubernamentales en apoyo al deporte, que permitan el desarrollo de atletas sólidos y federaciones bien estructuradas. Aunque reconoce que ha habido avances en este sentido, cree que aún queda mucho por hacer para garantizar un futuro próspero para el surf uruguayo y otros deportes emergentes.
Todo indica que para los Juegos de Los Ángeles 2028, el longboard será incluido en el programa olímpico
Más allá de ser un destacado surfista, Julián Schweizer guarda en su corazón una profunda devoción por Defensor Sporting, un club que ha estado intrínsecamente ligado a su vida desde temprana edad. Criado en el seno de una familia apasionada por el equipo, Julián ha llevado los colores de la viola con un orgullo inquebrantable, no solo en las olas, sino también en las canchas de básquetbol. Su conexión con el club se ha ido fortaleciendo a lo largo de los años, enriquecida por los recuerdos compartidos y la camaradería que solo el deporte puede brindar. Este lazo único se vio destacado recientemente con un emotivo homenaje en el Estadio Franzini, donde Julián recibió el cálido afecto y el reconocimiento de los aficionados, cimentando aún más su lugar en la historia del club y reafirmando su compromiso con los valores y la pasión que Defensor Sporting representa.
Para Schweizer, el presente y el futuro están marcados por un espíritu de determinación y superación. Con competencias programadas en España, Francia, Estados Unidos y Brasil, el surfista uruguayo se prepara para enfrentar nuevos desafíos y dejar su huella en las olas de todo el mundo. Con el apoyo de su equipo y el respaldo de su país, Julián Schweizer continúa forjando su camino hacia la cima del mundo del surf, con la esperanza de representar a Uruguay en los escenarios olímpicos y dejar un legado duradero en el deporte que ama.